Cambiar los neumáticos es una parte importante de ser propietario de un coche. No solo mejora la seguridad, sino que también optimiza el rendimiento del vehículo. Pero, ¿cuándo es el momento adecuado para hacerlo y cómo se hace de forma segura y eficiente? Aquí tienes todo lo que necesitas saber.
¿Por qué es importante cambiar los neumáticos?
Usar los neumáticos adecuados para cada estación es esencial para mantener la tracción y la estabilidad, especialmente en condiciones climáticas difíciles. Los neumáticos de verano están diseñados para el calor y carreteras secas o mojadas, mientras que los de invierno ofrecen un mejor agarre en hielo y nieve.
Beneficios de cambiar los neumáticos a tiempo:
– Seguridad: Reduce el riesgo de derrapes y accidentes.
– Mejor eficiencia de combustible: Los neumáticos adecuados ofrecen una resistencia óptima al rodamiento.
– Mayor vida útil de los neumáticos:Usarlos en las condiciones correctas reduce el desgaste.
¿Cuándo deberías cambiar los neumáticos?
En Suecia, es obligatorio por ley usar neumáticos de invierno entre el 1 de diciembre y el 31 de marzo si existen condiciones invernales en la carretera. Los neumáticos de verano deben colocarse cuando las temperaturas se mantienen por encima de +5°C.
Señales de que es hora de cambiar los neumáticos:
La temperatura ha cambiado y ya no es adecuada para los neumáticos actuales.
La profundidad del dibujo está por debajo del límite legal (se recomienda 3 mm para neumáticos de verano y 5 mm para los de invierno).
Los neumáticos muestran signos de daños o desgaste desigual.
¿Cómo cambiar los neumáticos?
Puedes cambiarlos tú mismo si tienes el equipo y los conocimientos adecuados, pero también puedes acudir a un taller profesional. Estos son los pasos para un cambio seguro:
1. Reúne las herramientas: Gato, llave de tuercas, llave dinamométrica y cuñas para ruedas si es necesario.
2. Aparca de forma segura: En una superficie plana y aplica el freno de mano.
3. Afloja las tuercas: Hazlo ligeramente antes de levantar el coche.
4. Levanta el coche: Usa el gato en los puntos indicados por el manual del vehículo.
5. Cambia las ruedas: Quita la rueda antigua, coloca la nueva y aprieta las tuercas con la mano.
6. Aprieta con llave dinamométrica: Una vez bajado el coche, aprieta las tuercas al par de apriete recomendado.
7. Revisa la presión: Asegúrate de que los neumáticos estén inflados según lo recomendado para un rendimiento óptimo.
¿Se puede simplificar el proceso?
Si prefieres evitar el esfuerzo de hacerlo tú mismo, un "hotel de neumáticos" es una excelente alternativa. Allí se almacenan en condiciones óptimas y el cambio lo realizan profesionales.
Conclusión
Cambiar los neumáticos es una parte esencial del mantenimiento del vehículo. No se trata solo de cumplir con la ley, sino de garantizar tu seguridad y la de los demás. Cambiarlos a tiempo y de forma adecuada optimiza el rendimiento del coche y prolonga la vida útil de los neumáticos. Si tienes dudas, un taller profesional o un hotel de neumáticos puede hacer que el proceso sea más cómodo y sencillo.